También ponderó a Antonio Vizcaíno Mata, plata en los XII Juegos 1995, Mar del Plata, Argentina; Winnipeg, Canadá; Juan Carlos Jacinto, bronce en los XIII Juegos 1999, Winnipeg, Canadá; Modesto Lara Arias, plata en los XIV Juegos 2003, Santo Domingo; María García Cáceres, bronce en los XV Juegos 2007, Río de Janeiro, Brasil y Teófilo Diek Andón, bronce en los XV Juegos 2007, Río de Janeiro, Brasil.
Según Casanova, esos atletas también deben ocupar un nicho en el Pabellón del Deporte Dominicano, porque fueron “buenos competidores y subieron a competir pensando" en el país”.
Modesto Lara Arias, plata en los XIV Juegos Santo Domingo 2003. (Fuente externa)
“No pretendo imponer pautas, pero siempre he propugnado para que separen por épocas a los atletas para su exaltación, debido a que la escogencia de un medallista de los años sesenta en juegos centroamericanos, por ejemplo, contrasta con la calidad deportiva de años recientes lo que crea discrepancias”, estimó el pasado el ex presidente de Judo.
Recordó que hasta la fecha solo están tienen nicho en el Pabellón de los Inmortales, Radhamés Lora (1992), Plata en San Juan 1979, Juegos Panamericanos; Juan Chalas (2003), bronce en Medellín 1978, Juegos Centroamericanos y del Caribe; Mamoru Matsunaga (2009), como propulsor; Dulce María Piña (2012), bronce en Mar del Plata 1995 y en Santo Domingo 2003; Juegos Panamericanos; Andrea Confesora Hernández (2014), plata en Indianápolis 1987, Juegos Panamericanos; y Vicbart Geraldino (2018), una medalla de oro, una de plata y cuatro en campeonatos panamericanos.
Jaime Casanova abogó porque se haga un reconocimiento especial a los propulsores provinciales y porque la escogencia sea por generación. (Fuente externa)