Tarragona 2018
Los Juegos Mediterráneos, a
punto tras superar todo tipo de
vicisitudes
- Se celebran un año después de lo previsto, pero algunas instalaciones se acaban de abrir
- 16 municipios acogen pruebas y Tarragona cuenta con nuevo palacio de deportes y piscina
- Juegos del Mediterráneo en directo, del 22 de junio al 1 de julio en TdP y RTVE.es
Tarragona 2018 aprieta el acelerador para llegar con los deberes hechos a los Juegos Mediterráneos, que acogerán a unos 4.000 deportistas de 26 países entre el 22 de junio y el 1 de junio, un año después de lo previsto por los problemas presupuestarios que ha sufrido el proyecto.
El alcalde de Tarragona, Josep Fèlix Ballesteros, suele contar el consejo que le dio Pasqual Maragall, el alcalde de Barcelona en los Juegos Olímpicos de 1992, cuando compartió con él la responsabilidad que sentía por tener que organizar los Juegos Mediterráneos en la ciudad.
La tranquilizadora respuesta fue: "No te preocupes porque el día anterior aún estarán pintando puertas y señalizando calles". El pronóstico de Maragall se ha cumplido y el ajetreo en torno a los preparativos de los Juegos, especialmente en lo que respecta al acabado de los últimos detalles de las instalaciones, se ha podido palpar durante las últimas semanas en todas las sedes.
Y es que en un evento de esta magnitud resulta imposible dejarlo todo perfectamente preparado con tiempo de antelación, incluso después de aplazarlo un año por la falta de financiación para llevarlo a cabo.
La organización ha vivido grandes tensiones políticas en todas las administraciones implicadas, excepto en la Diputación de Tarragona.
En los últimos cuatro años, la organización de la gran cita deportiva ha superado dos elecciones en Cataluña, diez meses con gobierno en funciones en España, el procès o desafío independentista, la aplicación del artículo 155 y una moción de censura en el ejecutivo español.
“Hemos tenido que rectificar más de 850 invitaciones“
Tanta incertidumbre política llega incluso a la ceremonia de inauguración. "Hemos tenido que rectificar más de 850 invitaciones", comenta resignado el comisionado de los Juegos del Mediterráneo, Javier Villamayor.
La exvicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáez de Santamaría, debía inaugurar la piscina olímpica -terminada en mayo- el 5 de junio, pero la moción de censura retrasó su estreno hasta el pasado sábado. En lugar de Santamaría, fue la nueva ministra de Política Territorial, Meritxell Batet, la encargada de presidir el estreno de la instalación.
Precisamente la piscina ha sido uno de los grandes quebraderos de cabeza para la organización y una de las últimas instalaciones en estar a punto, aunque su presupuesto ha pasado de los 12 millones de euros iniciales a adjudicarse por 2.
También se han acabado a toda prisa el campo de tiro y el velódromo, y el nuevo pabellón, donde se disputará la competición de balonmano, está previsto que se inaugure hoy.
Las previsiones de presupuesto de los Juegos se han aumentado y reducido varias veces. Finalmente, costará entre 67 y 68 millones la parte de inversiones en instalaciones y entre 29 y 30 la operativa, según Villamayor.
La operativa --la espina dorsal de los juegos en nóminas, movilidad o dietas-- la soporta sobre todo el patrocinio privado con 15 millones (lejos del objetivo) y el Estado, con 9 millones.
Nuevo Palacio de Deportes
La Generalitat ha aportado un total de 32,2 millones de euros, según el secretario general del Deporte, Gerard Figueras. Y ha financiado el Palacio de Deportes Cataluña, con capacidad para 5.000 personas, con una inversión de 18,3 millones de euros.
Entre las mejoras del Nou Estadi, que acogerá las ceremonias de inauguración y clausura; la piscina olímpica y las mejoras en la pista de atletismo, el Gobierno central ha destinado más de 15 millones en inversiones.
Los 16 municipios que participan tienen todos el rango de sedes. La Diputación de Tarragona ha aportado 14 millones en modernizar instalaciones que abarcan desde Salou a Calafell y otros 2 millones la de Barcelona, que acogerá en la capital la hípica y en Castelldefels el piragüismo y el remo.
Y el ayuntamiento de Tarragona también ha sufragado, con 12 millones, la urbanización de la Anilla Mediterránea.