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sábado, 15 de julio de 2017

Los Juegos Patrios

  • Los Juegos Patrios
    Mario Emilio Guerrero
megkrantz@hotmail.com
Tweeter: @megkrantz
Es común escuchar a la gente decir que donde quiera que uno va, se encuentra con un dominicano. Esto es debido a la gran cantidad de dominicanos o descendientes de dominicanos que hay repartidos por todo el mundo. De acuerdo al Pew Research Center, una institución dedicada a la investigación social, cerca de un millón 800 mil personas de origen dominicano reside en Estados Unidos y que en Puerto Rico y las islas caribeñas vive una cantidad que sobrepasa los 6 dígitos de ciudadanos que comparten nuestra nacionalidad, lo mismo que en Europa, principalmente en España.
Gran potencial
El caudal humano que esto representa es enorme y sin embargo, no hemos podido obtener los beneficios que en muchos aspectos podrían derivarse de este gran potencial con que contamos en el exterior, donde nuestros compatriotas cuentan con mayores facilidades para desarrollar sus capacidades. En el plano deportivo, por ejemplo, es muy poco el provecho que se ha sacado del conglomerado de atletas de origen dominicano que se ha formado en el extranjero. El fútbol y el baloncesto son las disciplinas que mayor ventaja le han sacado a esta situación, reclutando personal procedente principalmente de Estados Unidos y Europa.
Desde siempre
Pero, esa deficiencia de nuestro movimiento deportivo, en general, de ubicar y fichar deportistas de élite desarrollados en otras naciones, no es exclusivo de estos tiempos, sino que siempre ha sido así. Son pocos atletas de ascendencia dominicana residentes en el exterior que en décadas atrás integraron nuestros equipos nacionales.
Los primeros
Haciendo memoria, recuerdo al baloncestista Randolfo Marmolejos, cuya familia regresó de Nueva York luego de la muerte de Trujillo y nos representó en los Juegos Centroamericanos y del Caribe de 1962, celebrados en Jamaica y a Juan Herrera, otro jugador de baloncesto, quien reforzó a la selección criolla en un intercambio con el equipo Borinquen, en 1964. Herrera residía en Puerto Rico y jugaba en el torneo superior de la vecina isla.
Hugo y los Donovan
Luego, por intermedio del club San Lázaro, vino procedente de Nueva York, el inmenso Hugo Cabrera, en 1969, gran estrella del baloncesto dominicano. La urbe neoyorquina siguió aportando atletas para nuestros seleccionados y  para los Doce Juegos llegaron el estelar baloncestista Eduardo Gómez, fichado por don Virgilio Travieso Soto y quien por muy poco no jugó por Puerto Rico;  el corredor de 400 y 800 metros Iván L’Official, el velocista Julio Meares y el gimnasta José Domínguez. En los 70 y décadas posteriores surgieron figuras destacadas del baloncesto como Kenny Jones, Winston Royal, Edgar de la Rosa, Felipe López, Franklin Western, Jaime Peterson, entre muchos otros  y recientemente, Charlie Villanueva, Francisco García, Edgar Sosa y Karl Anthony Towns.
El súper Sánchez
A finales de los 90, entra en escena Félix Sánchez, recordista mundial y doble campeón olímpico de los 400 metros con vallas, figura cimera del deporte dominicano y en el nuevo milenio surge una extraordinaria camada de futbolistas integrada por Heinz Barmettler, Tano Bonnín, Elpys Espinal, Kerbi Rodríguez, Raúl de Tomás, Mariano Díaz y Luis Miguel Quezada, entre muchos otros que brillan en Europa. Estos deportistas, formados fuera del país, han puesto en alto el nombre de la República Dominicana a nivel internacional. Hay que señalar que muchos arribaron al escenario nacional, no por diligencias de nuestros dirigentes, sino por una eventualidad o por decisión de ellos o de sus familias. No hay dudas de que la cosecha hubiera sido a un mayor, si como ha hecho Puerto Rico desde hace muchos años, nuestros federados se hubieran dedicado a captar el nutrido talento deportivo  que tenemos diseminados por el mundo.
Gran iniciativa
Por eso, hay que resaltar la iniciativa del Ministerio de Deportes de reanudar la celebración de los Juegos Patrios, que en esta oportunidad, no sólo serán escenificados en Nueva York, Miami y Puerto Rico, sino que se ha añadido una cuarta sede, Madrid, para tambipen localizar y reclutar de manera institucional a los jóvenes valores que tenemos en Europa.
En Juegos Nacionales
Los atletas que se destaquen en estos eventos participarán en los Juegos Nacionales del próximo año, como representantes de la sexta (Estados Unidos), séptima (Europa) y octava (Puerto Rico y las islas caribeñas) zonas. De esta manera a esos deportistas de la diáspora se les dará seguimiento y muy pronto veremos a muchos de ellos representando al país, junto a los atletas desarrollados localmente.
NOTA: ARTICULO DEL PERIODISTA MARIO EMILIO GUERRERO EN EL PERIÓDICO EL LISTIN DIARIO DE SANTO DOMINGO, REPÚBLICA DOMINICANA EL SÁBADO 15 DE JULIO 2017.-